La frecuencia sexual, GRAN TEMA. Nada más latero que conversar con tu amiga que está recién saliendo con un tipo, donde el mundo es color de rosa y el sexo lo tienen a la vuelta de la esquina. Triste realidad, todas pasamos por ese momento glorioso pero muchas estamos muy lejos de él.
Me pregunto qué será lo que pasa que una vez que ya estas oficialmente de novia, conviviendo o casada, que la frecuencia automáticamente disminuye en un 50%.
¿Será la rutina? ¿lo poco novedoso? ¿el aburrimiento? muchas dicen “es que me da flojera”, pero ¿qué es la flojera? Es palabra no existe por si sola. Otras mujeres tienen fantasías sexuales en el silencio de su cabeza que jamás compartirán con nadie (sólo son su terapeuta y con una vergüenza del tamaño de una catedral). El otro día escuchaba que alguien decía:
“Mi sueño es que llegue este hombre (no se refería a su marido ni tampoco a un amante, simplemente a un hombre que vio una vez en un lugar y se flechó) y me tire a la arena con un poco de violencia y me haga el amor con pasión”.
Así de simple era su fantasía, pero al preguntarle qué pasaría si en vez de ese hombre eso lo hiciera su marido, la cara de frustración y aburrimiento era incomparable y dijo
“Es que él nunca lo haría, y yo nunca se lo pediría, porque ahí le quito toda la sensualidad”.
Esto me hizo pensar en que las mujeres queremos que nos rompan la rutina, aunque conscientemente decimos que no. Pero si lo llevas un poco más allá, de verdad que logras dar esa sorpresa y encender esa chispa que ya está por apagarse. Porque la verdad es que es una lata saber lo que va a pasar, irse a acostar sabiendo que tu hombre intentará tocarte o hacer el amor en el mismo lugar con la misma posición y los mismos minutos que siempre. ABURRIDOOOOO
Como me encanta comparar nuestro comportamiento con el de los animales, traigo al gallo a este post. Y es que leyendo sobre la copulación entre gallos y gallinas me topé con la sorpresa de que este animal es de lo más ingenioso para atraer a las hembras. Si las danzas no le resultan y siente la necesidad de aparearse, lo que haces es cacarear en un tono muy elevado para atraerlas hacia la comida, y cuando ellas están instaladas alimentándose el gallo las monta sorpresivamente por la espalda. ¡PUM!
Eso es el factor sorpresa lo que hace que la escena sea aún más erótica. Lo importante acá es captar el timming perfecto, no vas a llegar a tu casa a sorprender a tu mujer cuando ella está bañando o dándole de comer a tu hijo. ¡No! Si lo haces así te llevaras un GRAN rechazo
Pero si lo haces mientras los niños duermen, o están a cargo de otra persona y tu hermosa y bella mujer aunque esté con la peor pinta, te prende esa mini llama y activa esa fantasía que tú también quieres cumplir, ¡go for it!
Las relaciones hay que construirlas todos los días, no basta con haber tenido un príncipe azul al principio y después haya desaparecido. Tampoco basta con hacerse el regalo lindo o la cena romántica una vez al año. Hay que trabajar todos los días en construir una relación sana, plena y feliz. Mientras estén los dos, creo que ambos son responsables de regar la plantita, pero cuando nace un hijo necesitas que tu hombre se vista de jardinero y sea él quien durante un tiempo riegue las plantas para que el pasto no se seque, porque tú estás preocupada de un nuevo jardín, que requiere de tu total atención y dedicación.
Ojo, dije ‘por un tiempo’, no es para siempre. Es hasta que ya te sientas capaz de regar dos jardines a la vez. Ahí nuevamente comienza el trabajo para ambos. Nadie dijo que iba a ser fácil, pero sólo me queda decirte que lo que no soluciones con tu pareja actual, tendrás que solucionarlo con el siguiente. Tú decides con quien haces el trabajo.
Recuerden que pueden escribirme sus comentarios en privado a Michelle.pollmann@gmail.com aunque las invito a que los compartan por aquí, verán que no son las únicas que pasan por problemas similares.
Cariños y felices fiestas.
Mich.
0 Comments